Un año más, a finales del verano o principios del otoño, los polvorones reaparecemos como los turrones en octubre o las filas de compradores de lotería en Doña Manolita en julio.
Y otro año daremos la murga a quién quiera leernos, o sobre todo, a nuestras propias personas futuras cuando queramos recordar el viaje.
Después de tirarnos años cantando un temazo llamado "Obstetricia en Bucarest", (se puede oir, es para todos los públicos) , toca entonarla en tierras rumanas.
Poco vamos a decir de la primera noche, porque hemos aterrizado a las 22h y hemos recorrido 1h camino del hotel.
La buena noticia es que nos han hecho un "upgrade" de la habitación a "bussines". Que significa que tenemos sillones orejeros y para entrar a la bañera hay que hacer escalada.
Hemos salido con poca fe a cenar porque era tarde, pero para nuestra sorpresa estamos rodeados de garitos. Aquí parece que han conseguido organizar el entretenimiento nocturno total, al menos el masculino. Todos los bares tienen el mismo equipamiento: local interior abierto a una terraza en la calle. Puedes comer y beber, cocina abierta hasta las 2 o 4h. Buena cerveza Ciuc. Y ahora viene el extra, en todos hay un DJ, gogos bailando y múltiples pantallas con furgol.
Mañana empieza el viaje propiamente dicho.
Seguiremos relatando
PD: no deja subir fotos. Actualizaremos
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